Desayuno espectacular bajo la cúpula

El desayuno fue una experiencia sin igual, con una abundante selección de platos, desde jamón serrano hasta deliciosos pasteles, todo servido en la hermosa sala de la rotonda iluminada por una impresionante cúpula de cristal. La habitación era cómoda y contaba con todo lo necesario, pero el aire acondicionado no funcionaba del todo bien, lo que hacía que la temperatura fuera un poco incómoda durante la noche.

Confusión y ruido por las reformas del hotel.

El desayuno tiene una variedad increíble y la

atención del personal es excepcional. La ubicación es inmejorable, cerca de atracciones principales. Sin embargo, el ruido en la noche por el servicio de habitaciones fue molesto. En general, es una experiencia maravillosa que recomendaría a otros viajeros.

Llegué, probé y lo reseñé

Un hotel con una ubicación inmejorable y habitaciones amplias que prometen comodidad. Sin embargo, las reformas ruidosas y un servicio de desayuno lento dejan mucho que desear. Lo mejor fue la atención del personal que, aunque variable, hizo el intento por ser amable. Para tarifas de lujo, esperaba más.

El westin es un lugar increíble. La entrada y el hall son espectaculares, como un viaje a la elite del lujo. El gimnasio en el séptimo piso está muy bien equipado y el desayuno es variado, aunque la bollería es lo mejor. Además, la atención del personal es excepcional.

Lo recomiendo. Sin embargo, la habitación podría ser un poco mejor, ya que el balcón es difícil de acceder.

La habitación premium con vista a la ciudad era moderna y muy cómoda. Disfrutamos del desayuno bajo la hermosa cúpula de cristal, junto a un servicio excepcional de conserjería.

cerca de museos y parques, perfecto para pasear

La ubicación es simplemente espectacular, a menos de 10 minutos a pie del Parque del Retiro y el Museo Nacional Thyssen-Bornemisza, lo que hace que sea muy fácil explorar la ciudad con largas caminatas. además, el edificio tiene un encanto vintage que te transporta a otra época, a pesar de que necesita algunas mejoras en las habitaciones.

Insisto, este lugar es super recomendado para una visita relámpago.

Céntrico hotel, delicioso desayuno, a solo 5 minutos a pie de la estación Banco de España, donde disfrutarás de la belleza de la rotonda iluminada por la cúpula mientras degustas una variedad de platos exquisitamente servidos.

No tiene que mejorar nada.

Estuve cinco noches, el gimnasio está muy bien y el sistema de recepción es eficiente. La comida del bar es buena, pero el aire acondicionado en la habitación falló.

espectacular, espectacular, espectacular

La rotonda del hotel es un verdadero sueño, cada rayo de luz hace que el entorno sea mágico. Disfruté de un desayuno fabuloso bajo la imponente cúpula de cristal, un festín para los sentidos. Además, el bar tiene un encanto histórico que te transporta a otra época, ¡no te lo puedes perder!

lo recomiendo 😊❤️

La ubicación es inmejorable y el desayuno, especialmente los gofres malteados, es un verdadero lujo. Sin embargo, la habitación, aunque cómoda, tenía un aire acondicionado que no funcionaba adecuadamente, lo que afectó la calidad del descanso. hubo confusión en el servicio, que hizo que la experiencia no fuera tan placentera como se esperaba.

El lobby es impresionante, con un diseño elegante. Las habitaciones están muy bien cuidadas y ofrecen un confort notable. El desayuno en el restaurante tiene una buena variedad. El personal siempre está dispuesto a ayudar. En general, la experiencia fue muy satisfactoria. 😊

el personal fue excepcional y el desayuno con zonas impresionantes hizo que cada mañana fuera especial. la combinación del encanto histórico y el confort moderno hizo que me sintiera muy a gusto.

el aire acondicionado no funcionaba bien.

Actualmente, el hotel se encuentra en reformas, lo que limita el espacio de las zonas comunes como el restaurante y el área de desayuno. Esto provoca una sensación de desorganización y hace que la experiencia de estar en esas áreas sea menos placentera. Además, el servicio en el desayuno no estuvo a la altura, ya que hubo demoras significativas y confusiones en los pedidos, lo que afectó la experiencia general. Las almohadas también resultaron menos cómodas de lo esperado, lo que hizo que dormir no fuese tan agradable como podría haber sido.